Protección energética: Se considera que la malaquita es una piedra poderosa para la protección. Como ombliguera, se dice que puede actuar como un escudo energético, ayudando a bloquear y disipar las energías negativas que puedan afectar el área del ombligo.

Estimulación de la mente: La malaquita se cree que tiene la capacidad de estimular la mente y promover la claridad mental. Al usarla como ombliguera, se supone que puede mejorar la toma de decisiones y ayudar en la resolución de problemas, brindando una perspectiva más aguda y perspicaz.

Equilibrio emocional: Se asocia a la malaquita con el equilibrio emocional y la estabilidad. Como ombliguera, se cree que puede contribuir al equilibrio de las emociones, promoviendo la calma interior y la serenidad emocional.

Transformación y crecimiento: La malaquita se considera una piedra de transformación y cambio. Usada como ombliguera, se cree que puede ayudar en procesos de cambio personal, facilitando el crecimiento espiritual y emocional.

Sanación y purificación: La malaquita se asocia con la sanación emocional y física. Como ombliguera, se cree que puede contribuir a la purificación de energías bloqueadas en el área del ombligo, promoviendo así la salud y el bienestar general.